Soledad

Hola soledad:

Que fácil es saludarte mientras veo la cortina moverse con el viento en mi salón ¿Cómo te va? ¿Has tenido que hacer muchas visitas? Supongo que sí, tal y cómo están las cosas, cada día hay más gente sola.

Porque en las malas nadie quiere estar, porque el dinero se ha llevado con él las risas y la despreocupación, porque cada día hay más corazones vacíos y calles más llenas.

Llenas de gente sin recursos ni recuerdos. La primera vez que sientes en todo tu cuerpo el frío de una baldosa, olvidas todo, los momentos maravillosos que has vivido, la gente que has conocido, el momento de compartir una coca cola en un bar.

Soledad, estar aquí, preguntándote esto me hace pensar en los momentos en que te sentimos. Sentimos que somos la única persona con problemas, pero lo cierto es que hay personas con problemas más grandes que los nuestros y cosas irremediables en el mundo, que invaden a la gente, que los hacen sentir que mueren, que hacen que pierdan las ganas de vivir, de volver a sentir.

En el mundo, soledad, tu eres la única que está ahí en todo momento y aunque a veces se te quiere y otras en cambio eres odiada, siempre vuelves a los corazones de quienes en los ojos sólo tienen lágrimas.